El autor es catedrático de la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense de Madrid. De forma muy amena, con el formato de un trepidante thriller, narra las vicisitudes de un caso en el que fue protagonista, defendiendo a ocho acusados que fueron víctimas de los excesos de un juez instructor implacable y justiciero.El libro está relatado en primera persona, con un narrador que nos sitúa en el ambiente único de la cafetería Riofrío, situada estratégicamente cerca de tres instituciones pilares del sistema judicial español, el Consejo General del Poder Judicial, el Tribunal Supremo y la Audiencia Nacional. Esta cafetería es un “Mentidero irrepetible y observatorio singular del desarrollo de los procesos en las dos instituciones judiciales más importantes de España” y en ella se juntan diferentes grupos de personas relacionadas con el mundo de la justicia “abogados, procuradores, peritos, testigos, imputados, procesados, condenados, demandantes, demandados y, en fin, el público curioso que gasta su tiempo siguiendo las sesiones de los juicios”.
Sentado en una mesa de esta cafetería, en una fecha cercana a la Navidad de 2008, el abogado recuerda el juicio que se inició en septiembre de 2006 contra ocho personas, imputadas por delitos de defraudación tributaria y falsedad. Los hechos se remontaban a julio de 1997, en una acusación injusta y arbitraria. El abogado comenzaba en aquella época y mostraba una inocencia y candidez que pronto cambiaron al empezar a sospechar que “el Estado de Derecho no funcionaba en España según las claves que yo había aprendido hasta entonces”.
El proceso tendrá como juez instructor a una figura relevante, gran protagonista de la actualidad política y judicial del país, cuya identidad no se desvela en ningún momento, aunque como ya podéis sospecha, no habrá dificultades en lograr su identificación. El libro es la historia de este juez que “pretendió durante años crear un imperio propio, desvinculado de las leyes, gobernando sentado en un reluciente trono de oro”.
En un principio, el relato se presenta como una historia de ficción, pero en cuanto empiezan a aparecer nombres de personajes y empresas conocidas nos damos cuenta de que estamos ante un proceso real, que tuvo como protagonista al juez mencionado y a un empresario también muy conocido, que ocupa en la actualidad un puesto de liderazgo político en un país cercano.
El proceso desvelará las deficiencias de nuestro sistema judicial, mostrando todo tipo de injusticas, acusaciones arbitrarias, complicidades entre jueces, fiscales y medios de comunicación, manipulación de instrucciones, juicios paralelos, trasiego de información entre Juzgado y prensa, etc. Asistimos a un rosario de irregularidades que llevan al autor a la conclusión de que “no existe ninguna garantía de los derechos durante la instrucción penal en España. No hay, en este período del procedimiento penal, una observancia rigurosa de los principios del Estado de Derecho. Rige, por el contrario, una inasible ley de la selva, sin reglas prefijadas, en la que actúa como inapelable dios creador el instructor, que establece las normas y resuelve a su anchas”.
Pero el abogado, a pesar de su bisoñez inicial, no se conformará y comenzará una rebelión contra las injusticias y el abuso de poder en el sistema judicial español.
¿El desenlace? Como puedes imaginar, no te lo puedo contar, tendrás que leer el libro. Aunque, te lo advierto, prepárate para pasar miedo ya que su contenido estremece más que una novela de terror.
(Reseña publicada en MujerdeHoy).
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